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miércoles, 19 de febrero de 2014

Patatas Guisadas con Costillitas

Un primer  plato muy fácil de hacer, económico y con un resultado delicioso.
En casa de mis padres lo hemos comido de toda la vida, aunque no siempre teníamos las costillas para añadírselas.
En la actualidad, yo suelo hacerlo como plato único.
Ingredientes:
- Patatas.
- Cebolla.
- Ajos.
- Pastilla caldo de pollo.
- Laurel.
- Pimiento.
- Tomate.
- Costillas de cerdo a trozos.
- Sal.
- Aceite de oliva.
- Colorante.
- Pimienta negra molida.

 Preparación de la receta:
Hay una gran  diferencia de dureza y tiempos de cocción entre las costillas de cerdo y las patatas.
Por ese motivo yo suelo meter en el olla rápida las costillas para ponerlas un poco tiernas y luego añado las patatas y termino de elaborar el plato.
Vamos a hacer el sofrito. Podemos usar una sartén y luego volcar el sofrito en la olla donde vayamos a hacer las patatas, o hacer el sofrito directamente en la olla.
Yo lo hago de la segunda forma, en la olla rápida.
En la olla ponemos aceite de oliva.
Picamos cebolla, los ajos y los añadimos al aceite.
A continuación troceamos el pimiento y el tomate.
Lo añadimos también a la olla. Este sofrito podemos después si no queremos que se vea en las patatas, triturarlo. Si no lo vamos a triturar, yo suelo echar la cebolla, el ajo y el pimiento a trozos grandes y antes de servir en el plato, lo saco. El tomate conforme va haciéndose el sofrito, lo voy machacando en la misma olla. Añadimos la hoja de laurel.
Cuando el sofrito esta hecho, añadimos las costillas troceadas. El tamaño de los trozos dependerá de nuestro gusto y se las pediremos al carnicero con más o menos carne, pero procurando que le quite toda la grasa posible.


Vamos removiendo el sofrito con las costillas para que ligue bien, y dando vueltas a la carne para que pierda el color de la sangre.
Al cabo de un ratito, incorporamos un chorreón de vino y dejamos otro rato al fuego.
Añadimos un poco de agua para cubrir las costillas, cerramos la olla rápida y la tenemos al fuego unos ocho o diez minutos. Las costillas estarán un poco tiernas, pero no acabadas de hacer.
Cuando lo permita, abrimos la olla.



Las patatas las pelamos y cortamos a trozos. Para calcular la cantidad, yo suelo medirlas en un plato, cuento un plato como el que veis por comensal.


Las añadimos a la olla ya abierta con el sofrito y las costillas a medio hacer.
Añadimos la sal, un trozo de una pastilla de caldo triturada, colorante alimentario y una pizca de pimienta negra  molida.
Añadimos agua a la olla y dejamos hervir a fuego lento para que las patatas se vayan poniendo tiernas y mezclándose con el sofrito y las costillas.
Cuando las patatas estén tiernas sin llegar a romperse, y el caldo espeso, apagamos y ya están listas para servir. El tiempo a fuego lento suele ser de alrededor de una hora.


Años atrás en casa de mis padres, cuando no disponíamos de carne para guisarla con las patatas, las hacíamos igual que os he comentado, solo que al final para no comer solo las patatas, un ratito antes de apartarlas le cuajábamos un huevo para cada persona.

Espero os resulte útil. Si tenéis alguna duda o comentario estaré encantada de leerlo.
Tiempo de elaboración: bajo.
Dificultad: baja.


lunes, 10 de febrero de 2014

Arroz con pollo


Un clásico de la cocina y uno de mis platos favoritos.
Desde que recuerdo, siempre me ha encantado comer mi arroz con pollo el sábado.
De hecho me gusta una vez el arroz y la carne en el plato, quitar todos los huesos a la carne y desmenuzarla en trozos más pequeños, para ir comiendo arroz mezclado con el pollo.
Otra de mis preferencias: me gusta el arroz de toda la vida, procuro calcular el tiempo de cocción para que no se pase.
Lo retiro del fuego cuando aun no está tierno del todo y lo dejo reposar para que acabe de hacerse.
En casa siempre se come como plato único.
Ingredientes:
- Arroz.
- Aceite de oliva.
- Cebolla.
- Pimiento verde.
- Tomates frescos.
- Ajos.
- Laurel.
- Pollo troceado.
- Vino de cocinar.
- Colorante.
- Pimienta molida.
- Sal.
- Pastilla de caldo de pollo.

Preparación de la receta:
Vamos a hacer el sofrito. Podemos usar una sartén y luego volcar el sofrito en la olla donde vayamos a hacer el arroz, o hacer el sofrito directamente en la olla.
Yo lo hago de la segunda forma, en una olla de las de toda la vida.
En la olla ponemos aceite de oliva.
Picamos cebolla, los ajos y los añadimos al aceite.
A continuación troceamos el pimiento y el tomate.
Lo añadimos también a la olla. Este sofrito podemos después si no queremos que se vea en el arroz, triturarlo. Si no lo vamos a triturar, yo suelo echar la cebolla, el ajo y el pimiento a trozos grandes y antes de servir en el plato, lo saco. El tomate conforme va haciéndose el sofrito, lo voy machacando en la misma olla. Añadimos la hoja de laurel.
Cuando el sofrito esta hecho, añadimos el pollo limpio y troceado. El tamaño de los trozos de carne, dependerá de cómo nos guste, a mi particularmente me gusta en trozos pequeños.



Vamos removiendo el sofrito con la carne para que ligue bien, y dando vueltas a la carne para que pierda el color de la sangre.
Al cabo de un ratito, incorporamos un chorreón de vino y dejamos otro rato al fuego.
Cuando el sofrito está terminado, llega el momento de añadir el agua.
El cálculo es importante, y se consigue con la práctica.
Por poner un ejemplo, yo lo cocino, un vaso de arroz, 4 vasos de agua, esto sería para dos personas.
Teniendo en cuenta no solo el tiempo de cocer el arroz, que en mi caso suelen ser 15 minutos, sino desde que incorporo el agua al sofrito y el tiempo que necesita la carne para ponerse un poco tierna, ya que se acabara de poner en su punto en el tiempo que este cociendo el arroz.
Vale. Nos habíamos quedado en que el sofrito ya estaba y añadíamos el agua.
Añadimos sal, colorante y una pizca de pimienta molida.
Si te gusta puedes ponerle también media pastilla de caldo de pollo.
Removemos todo y cuando empieza a hervir, bajamos el fuego y  lo dejamos cocer una media hora corta.
Comprobamos como está la carne, teniendo en cuenta que no puede estar tierna del todo ya que después va a hervir otros quince minutos con el arroz.
Calculamos la hora que queremos comer, pensando que el arroz estará al fuego unos quince minutos y entre cinco o diez en reposo.
Si el caldo se ha enfriado, lo ponemos de nuevo hasta que hierva y cuando llegue ese punto incorporamos el arroz y sin que deje de hervir, bajamos el fuego a lo mínimo y dejamos que se haga poco a poco.


Removemos de vez en cuando procurando que el arroz no se rompa. Si nos quedamos cortos con el agua, mientras estamos cociendo el arroz podemos añadir un poco, pero siempre caliente para que no se corte la cocción si añadimos agua fría.
Cuando lleve quince minutos lo probamos y si ya está casi tierno, lo apartamos y dejamos que repose, que consuma el caldo sobrante y se acabe de hacer.

Después de su reposo, lo servimos en los platos y a comer. Delicioso.



Espero os resulte útil. Si tenéis alguna duda o comentario estaré encantada de leerlo.

Tiempo de elaboración: bajo.
Dificultad: baja.


lunes, 3 de febrero de 2014

Esparragos en Salsa

Un primer plato típico de mi tierra. Lo recuerdo desde que tengo uso de razón. He vivido muchos años en el campo. Es agradable la sensación de salir al campo, coger los espárragos y después cocinarlos.
Cocina sencilla con productos de nuestro campo. Actualmente ya no son tan asequibles a todo el mundo estos espárragos silvestres, por lo que es más frecuente comerlos de los que se cultivan en la  huerta.
Ambos están deliciosos, pero ni que decir tiene que el sabor de los espárragos silvestres es especial.
Muy fácil de hacer y económico.
Aquí os dejo la receta para el que quiera probar:
Tanto los silvestres del campo como los de la huerta quedan deliciosos en salsa.
Puede ser un primer plato, pero yo aconsejo se cocine para plato único, porque suele saciar mucho.
Ingredientes:
Un manojo de espárragos silvestres o de huerta.
Cebolla.
4 Ajos.
Laurel.
Tomate frito.
Aceite, sal, pimienta molida, pimentón dulce, colorante.
Preparación  de la receta:
En primer lugar lavamos muy bien los espárragos.
Con las manos los vamos cortando a trozos hasta que notemos en la parte más cercana a la raíz que ya está duro y no se puede cortar con la mano.


Si son silvestres, más finos, podemos dejar los trozos más grandes. Si son de huerta, algunos pueden ser más gordos, estos habrá que córtalos a trozos más pequeños.
Picamos la cebolla no demasiado pequeña ya que después la vamos a triturar.



Pelamos los ajos y los partimos por la mitad para dar mas sabor.
Freír la cebolla y tres ajos, sacar, triturar con un ajo crudo y reservar.



Echamos los espárragos en el aceite de haber frito la cebolla y le añadimos sal, pimienta molida, laurel, la cebolla y los ajos triturados, el pimentón dulce, una pizca de colorante y  el tomate frito.





Dejamos sofreír un rato y añadimos agua para que hiervan los espárragos y se pongan tiernos.



Antes de retirar del fuego, añadimos una cucharadita de harina disuelta en un poco de agua. La ponemos en el centro haciendo un hueco y removemos bien. De esta forma espesaremos la salsa.
Añadimos también un huevo por cada comensal para que se cuaje con la salsa de los  espárragos.  




Dejar que el huevo se acabe de cuajar, servir los espárragos  y un huevo por persona tapado por la salsa.
             Tiempo de elaboración: Bajo.
Dificultad: baja.


Espárragos en Salsa